No rechaces a Jesús
¿Cómo anda tu relacionamiento con Dios? ¿Andas un poco alejado de Dios, descarrilado de los caminos de Dios? Nuestra desobediencia a Dios deja heridas, y la culpa es una de ellas. Pero confía en Jesús. Pues Él cura nuestras heridas. Con Él tenemos la oportunidad de un recomienzo. La certeza de que ya fuimos perdonados es el remedio que va cicatrizando las heridas dejadas por el pecado. No rechaces la invitación de Jesús. Confía en Él y tendrás la vida eterna. Hoy es el día que Él preparó para que te arrepientas. No dejes para mañana, pues puede ser tarde. Confía en Dios y todo se arreglará. Él te protegerá. No tengas miedo de Dios, pues Él promete perdonar a todos los que confiesen a Él sus pecados. ¡Confía en Jesús! Todas las demás cosas Él ya hizo por ti.
“Tanto amó Dios al mundo, que dio a su Hijo único, para que todo aquel que cree en él no muera sino que tenga vida eterna” (Juan 3:16)